¡Viva la República! ¡Muera Franco!
Casi con seguridad, esas expresiones fueron comunes entre los integrantes de las milicias republicanas entre 1936 y 1939 ante el avance devastador de las tropas que comandaba quien rigió los destinos de los españoles por espacio de casi 40 años.
Una tal María de los Angeles (Angelines) Fernández Abad decidió tomar las armas y subir a las montañas hasta convertirse en una auténtica antifranquista. Claro que pocos saben quién era Angelines, pero sí conocen a Doña Clotilde o La Bruja del 71, ese personaje por ella encarnada en la comunidad del Chavo, que vivía enamorada de Don Ramón, relación que mantenían dentro y fuera del set de filmación.
Angelines nació en Madrid un 9 de junio. Ya arrancamos por no poder precisar el año, ya que algunos lo ubican en 1922 y otros en 1924. Pero sí que desde muy pequeña le puso el pecho a los conflictos sociales y políticos y que era una adolescente cuando se desató la Guerra Civil Española. Tenía convicciones antifranquistas que expresó desde muy pequeña, al punto de tomar las armas para llevarlas a la práctica.
Fue su hija Paloma Fernández quien dijo de su madre:
“Era una mujer de carácter fuerte. Para ella no había medias tintas, era blanco o negro, no podía haber grises. Era una mujer que tenía altos valores y a veces la gente no se los tomaba muy bien”.
De ahí que se dijera que tenía mal carácter o que era hosca. Casi como su personaje en el Chavo del 8.
Desde muy joven se unió al grupo de resistencia anarquista Maquis, que actuaba desde las montañas blandiendo explosivos y utilizaba tácticas militares. Esas milicias, en algún momento y enfrentamiento, llegaron a superar en número a las fuerzas franquistas. Quedaron marcados y al finalizar la guerra los opositores fueron perseguidos y muchos optaron por refugiarse en otros países. Tal fue el caso de Angelines, que eligió México, que gracias al presidente Lázaro Cárdenas les abrió la puertas.
Llegó al país centroamericano en 1947. De ahí se trasladó a La Habana, para luego regresar a México para actuar en películas, teleteatros y radionovelas. Se la pudo ver de la mano de Cantinflas y Arturo de Córdova en “El padrecito”, “El profe”, “Corona de lágrimas” y “El chanfle”. Fueron un total de 30 producciones y 20 series para quien ya había abandonado las armas, pero nunca sus convicciones, las que compartía con su eterno amigo, Ramón Valdés (Don Ramón), al punto de ser la única de los integrantes del famoso programa que asistió al funeral del actor.
Don Ramón, fuera del set, siempre estuvo enamorado de Angelines, destacando su belleza (que la tenía), perspicacia e intelecto y gracias a esta amistad es que conoce a Roberto Gómez Bolaños y se suma a su troupe.
Con los años perdió la belleza que la destacaba, pero sus dotes actorales la llevaron a convertirse en la mujer anticuada y enojona de la comunidad del Chavo, pero que se aflojaba al ver a su enamorado Don Ramón.
Murió el 15 de marzo de 1994, a los 71 años, víctima de un cáncer de pulmón por su tabaquismo crónico.
Su vestido celeste, bien cerrado, largo, con zapatos negros y sombrero de arreglo floral, pelo canoso y tirante gracias a un rodete, eran su escapatoria de aquella miliciana anarquista y republicana de una guerra civil que dejó casi un millón de muertos.
👀Archivo
👉Dale, convertite en un influencer.- Dejá atrás tu vida anodina y sin “sabrosor” y pasá a convertirte en un influencer, esos especialistas que primero venden su imagen hasta cansar para después pasar a ser auténticos marketineros que invadieron Instagram y otras redes sociales. Aquí tenés un tratamiento sobre el tema en El Bazar de Marcelo.
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Esa es la cifra de nuevos suscriptores digitales del The New York Times durante el segundo trimestre de 2021, repartidos de esta manera:
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Es la envidia de más de un medio de comunicación.
👉Las mujeres y el periodismo.- ¿Será el 2021 el año de los grandes cambios en el periodismo? Las mujeres llegaron a las altas cúpulas y comenzaron a dirigir medios que hasta ahora eran conducidos por hombres. Incluso, desde más de cien años. En Argentina aún no se han producido estos cambios, pero aquí dejo algunos ejemplos de lo que ocurre en el mundo.
Alessandra Galloni, primera mujer en conducir Reuters en 170 años de historia.
Roula Kalaf, es la primera mujer que dirige el “Financial Times” en sus 133 años de historia.
🎶La última función.- Después de una segunda actuación con Lady Gaga en el Radio City de Nueva York, Tony Bennett días pasados se despidió de los grandes conciertos en vivo. One Last Time fue el título elegido para el concierto despedida, que resultó a la vez anticipo de la llegada del nuevo álbum.
Lady Gaga y Tony Bennett interpretaron parte de su repertorio compartido en una serie de shows que tuvieron lugar en el Radio City en la ciudad de Nueva York y que han sido anunciados como las últimas presentaciones públicas del emblemático crooner. Pero antes protagonizaron un nuevo video del tema “I Get a Kick Out of You”, canción que se presenta como adelanto de Love for sale, el álbum de versiones que el dúo lanzará durante el próximo mes de octubre.
La interpretación conjunta de este clásico marca la última colaboración del icónico cantante de 95 años con la superestrella pop. En las imágenes, la artista se muestra visiblemente conmovida al observar a su compañero, quien lucha desde hace varios años contra la enfermedad de Alzheimer, entonar sus versos.
Gaga mira con cariño a Bennett a lo largo del video, sonríe y lo abraza con lágrimas en los ojos mientras cantan juntos la canción. Los allegados al cantante, entre ellos su esposa, Susan Benedetto, confirmaron que el artista fue diagnosticado de Alzheimer en 2016, fecha a partir de la cual su equipo médico le recomendó que siguiera en la música a medida que sus condiciones físicas se lo permitan mientras avanzaba la enfermedad. Ahora, ya es historia ante la decisión de dejar los escenarios.
👉Para Van Gogh, el amarillo era un lindo color.- Parado ante La Noche Estrellada uno no puede dimensionar todo lo que Vincent Van Gogh quiso plasmar en un óleo sobre lienzo de 73x92 centímetros. Menos para 1889 cuando la pintó. Una luna, varias estrellas en el firmamento, un pueblecito y un ciprés a los pies de unas pequeñas montañas. Sin embargo surgen muchas dudas sobre la forma de pintar de esa manera por parte de Vincent: ¿Era su estilo o respondía a algún tipo de problema visual?
El amarillo es un color presente en toda la obra de Vincent Van Gogh. ¿Hay una explicación? Lo más probable es que se deba a digital. Se trata de una droga utilizada para el tratamiento de las crisis maníacodepresivas y que lo hacía alterar en su percepción de los colores. El pintor la consumía habitualmente en un intento de paliar los ataques que sufrían su cuerpo y mente, ya que se le atribuían propiedades sedantes y antiepilépticas. Es por eso que Van Gogh veía el mundo a través de un filtro amarillo que plasmó en sus obras. Entre sus obras donde prevalece el amarillo se encuentran “La casa amarilla”, “Terraza de café por la noche” o “La avenida de los Alyscamps” entre otras.
Los médicos desaconsejan y desaconsejaban enfáticamente el abuso de la droga, que podía producir síncope al disminuir los latidos del corazón y causar la parálisis del órgano.
La otras hipótesis apuntan a que es posible que el pintor sufriera glaucoma de ángulo cerrado subagudo. Esta dolencia visual explicaría los “halos” que Van Gogh pintaba en algunas de sus obras y que son evidentes en varias pinturas como “El café de noche” o “La noche estrellada”.
La Noche Estrellada es una de las obras más famosas del mundo y está expuesta desde 1941 en el MoMa de Nueva York. En La Noche Estrellada el contraste entre el cielo y el pueblo es evidente: remolinos dinámicos en el firmamento frente a la quietud de las líneas simples y rectas del pueblo. Es el paisaje ondulado donde se acentúa el aire onírico de la pintura y el ciprés toma forma de las llamas de una gran hoguera ascendiendo hacia el cielo, mientras el firmamento parece una ola que avanza en medio del océano.
Se sabe que Van Gogh era un gran entusiasta del arte japonés y se inspiró, sin duda, en “La gran ola de Kanagawa” que Katsushika Hokusai pintó 60 años antes. Sobre la comparación con la ola, Vincent escribió en una carta a su hermano Theo: "Estas olas son garras, el barco está atrapado en ellas, puedes sentirlo". El firmamento de Van Gogh atrapa el pueblo de la misma manera.
No obstante, Van Gogh pintaba el paisaje que veía desde su habitación: las montañas son la cordillera de Les Alpilles, mientras que el pueblecito es de cosecha propia, ya que su ventana se encontraba en el lado opuesto a Saint Rémy y desde ella no veía ningún pueblo. Hay quien ve en el alto campanario un recuerdo de una localidad de su Holanda natal.
En cuanto al cielo, dominado por la luna menguante de junio (en forma de C, en el hemisferio norte), elaborada a base de la acumulación de colores uno sobre otros tan típica de Van Gogh.
El artista era un maestro del empaste, una técnica en la que la textura de la pintura forma parte de la propia imagen. "Mirar las estrellas siempre me hace soñar. Así como tomamos el tren para llegar a Tarascon o Rouen, tomamos la muerte para alcanzar una estrella. Morir tranquilamente de vejez sería ir allí a pie”, le comentó Vincent a su hermano Theo.
Y son las estrellas las grandes protagonistas del paisaje. Enormes puntos que iluminan la oscuridad. Muy diferentes las unas de las otras si nos acercamos.
Un año después de pintar el cuadro escribía una carta a Émile Bernard en la que parece que se refiere al cuadro, del que no parecía muy seguro: "Me dejo ir haciendo estrellas demasiado grandes, etc… Otro fracaso y ya he tenido suficiente".
Sin embargo, los astrónomos sostienen que la mayor de todas no es una estrella, sino que se trata del planeta Venus, visible en las madrugadas del mes de junio de 1889.
Fuente: Nat Geo España